El trabajo infantil en Colombia es una problemática que si bien ha venido disminuyendo en los últimos años, también se enfrenta a un panorama del que poco se habla, pero que afecta a miles de niños, niñas y adolescentes en todo el territorio nacional, y es que deben asumir responsabilidades del hogar, para apoyar a sus padres.
Actualmente, según cifras del Dane a corte 2022, 369.000 menores de edad, entre los 5 y los 17 años, ejercen algún tipo de trabajo infantil. El 55,6% de esta población se encontraba ubicada en centros poblados y rural disperso (206.000 personas) y el 44,4% en ciudades principales o cabeceras (164.000 personas).
En su más reciente reporte, esta autoridad estadística señala que “el 69,5% de la población de 5 a 17 años que se encontraba trabajando eran hombres (257.000 personas) y el 30,5% eran mujeres (113.000 personas). Por rangos de edad, la mayor concentración de niños, niñas y adolescentes que trabajan, se presentó en el rango de 15 a 17 años con 70,1%, mientras que la población de 5 a 14 años fue el 29,9%”.
Se trata del Trabajo Infantil Ampliado, que según el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, se presenta cuando un menor “realiza tareas domésticas y labores al interior de la familia todos los días, sin receso y durante una (1) hora diaria mientras sus padres, madres o cuidadores se encuentran trabajando”.
En este punto, el Dane reporta que el indicador de TTIA (Tasa de Trabajo Infantil Ampliado) para 2019 era del 10,4%, para el 2020 subió al 10,6%, en 2021 cayó al 9,8% y en el reporte del 2022 se trepó al 11%. En este último dato, si se le agrega el cuidado de familiares, además de los oficios del hogar, se crece al 12,6%.
Al revisar las principales razones por las que los menores de 5 a 17 años trabajan actualmente, según el Dane un 37,1% dice que lo hace para tener su propio dinero, el 33,3% debe participar en la actividad económica de la familia y un 15,7% acude a esto para ayudar con los gastos de la casa o para costearse los estudios.
Fuente. Portafolio